ADOCTRINAR XXVI






Finalmente en la anterior jornada convenimos, primero, en la posibilidad de seguir con nuestras jugadas. Luego, efectivamente, decidimos continuarlas.





Hemos dado la vuelta al tablero. Faltaba por decir que éste es transparente. Lo que hace difícil jugar sobre esta otra cara, la cara de la Convicción. Es fácil confundirnos en el área de lo socialmente delineado en el anverso de nuestro tablero, a saber: Inculcación y manipulación. Pues pudiera parecer que cuanto consta en adoctrinar (manipular + inculcar) fuese no otra cosa que pura convicción.





Ahora habremos de movernos con suma cautela para no dejarnos confundir. El más amplio ámbito de Convicción está por ser urdido, pues éstas, las convicciones, han de ser, aún en gran medida formadas, por no otros que nosotros mismos en particular (yo, tú, él, nosotros...) en éste nuestro mundo global, regido imperiosamente por los Ecónomos predominantemente laicos al parecer, sin dejar de incluir a los no laicos. Recordemos nuestro más que posible sistema totalitario, que como tal se pretende en él reducir a nada nuestra capacidad de formarnos convicciones. Al menos, al dar la vuelta a nuestro tapete de juego, sabemos que no hemos de jugar las cartas que se usan para adoctrinar. No tenemos, aquí, líneas de acción, ni de fuerza preestablecidas, aquí en esta zona, la de Convicción. Habrá que jugárselas. Aunque sí sabemos, por experiencia, que convicciones sin acciones, a lo sumo, son continentes inconexos de buenas palabras, tal vez bonitas incluso aunque completamente hueras.





No sabemos como y cuales son los contornos y las líneas principales de lo que ahora nos disponemos a jugar. A eso jugamos ahora: A atender como delineamos en Convicción. La superficie de nuestro tablero está, si no nos dejamos confundir por lo aparente, con muy escasos puntos dispersos aquí y allá. Puntos que habrán de ser relacionados con grafías, orientadas por el pensamiento, que habrán de re-clamar, ya mientras las vayamos configurando, sus correspondientes áreas acción personal.





Una vez más. Atención a lo aparente. Sobre la cara de nuestro tablero que ahora nos toca jugar y por virtud de su transparencia, aparece repleta de formalismos que son del anverso (todos hechos a base del verbo adoctrinar). Son, por su revés, lo simétrico correspondientes a Adoctrinar y de ninguna manera a Convicciones. Ésas, dada su escasez en cualquier régimen totalitario, están en gran medida por formar. Siempre, esas formaciones, a la manera de un urdido transitoriamente válido y presto a nuevas realizaciones por y para el querer humano. Nuestra formación previa al respecto debe estar altamente deteriorada, dado que -hay serias sospechas de ello- andamos en uno de esos sistemas, tan totalitario que para más inri es, cada vez más, mundial.





[youtube https://www.youtube.com/watch?v=fUA1tyQUpwY?list=RD049OBYmLLLg&w=640&h=360]

Comentaris

Entrades populars d'aquest blog

BENEFICIOS (7)

ADOCTRINAR XXIX

BENEFICIOS (10)